Que el invierno te encuentre con las defensas altas!

1) Cómo fortalecer el sistema inmunológico?

Como medida universal es importante saber que estos virus se propagan y contagian fácilmente por las secreciones corporales que los contienen, por eso para evitar propagarlos al estornudar conviene taparse la boca con un pañuelo descartable y luego colocar el pañuelo en una bolsita hasta que podamos arrojarlo al cesto de residuos.

– Lavarse las manos constantemente es otro consejo de importancia y si es posible usá alcohol en gel para eliminar los virus.

– Si hay una persona enferma en casa, hay que asegurarse de desinfectar los objetos de uso común para evitar los contagios.

– Lavar bien los alimentos: todas las frutas y verduras fueron tocadas por muchas personas, desde que se cosecharon hasta que llegan a nuestras manos. Incluso hay que lavar aquellas que se comen sin piel.

– Evitar automedicarse: siempre es necesario consultar con el médico lo que se debe y puede tomar.

Cómo alimentarse en invierno?

La comida y la bebida caliente ocupan un papel fundamental en esta época, ya que nuestro cuerpo necesita alimentos consistentes que nos sacien el apetito y, al mismo tiempo nos ayuden a soportar las bajas temperaturas de la época invernal. Los caldos y las sopas magras de verdura son ideales. Aprovecha a incorporar legumbres combinadas con cereales y vegetales en preparaciones calientes.

Los Líquidos en invierno son importantísimos, porque ayudan a mantener la hidratación correcta del cuerpo y evitan que las mucosas se resequen.

El agua al igual que las verduras son indispensables en nuestra dieta. Sin embargo, no hay que olvidarse de que hay más alternativas, por ejemplo: té verde, matcha u otras infusiones. Incluso podemos tomar la leche de avena o almendra, que son más ligeras y favorecen la digestión. Si se prefiere un jugo de fruta, es mejor optar por uno natural y recién exprimido ya que tiene vitamina C.

La vitamina C es fundamental: su poder antioxidante fortalece las defensas del organismo y ayuda a eliminar toxinas. Además, Interviene en el aumento de resistencia a resfríos e infecciones. Favorece la cicatrización de heridas y favorece la absorción de hierro previniendo la anemia. Son fuentes de vitamina C: frutas frescas no cocidas, tomates, cítricos como naranjas, pomelos, kiwis y limones. Los pimientos y las verduras de hoja oscura como el brócoli, ajies o las coles.

La vitamina A, también ocupa un papel importante ya que interviene en la integridad del epitelio (piel y mucosas) y en el funcionamiento del sistema inmunitario. Se puede conseguir en pescados, yema de huevo y en vegetales verde oscuros, amarillos, naranja o rojos (zanahoria, espinaca, ajíes, entre otros).

El ajo y la cebolla son alimentos con propiedades inmuno-estimulantes que ayudan reforzar el sistema inmune y además tienen propiedades bactericidas.

La vitamina B fortalece el sistema inmunológico. La podemos encontrar en vegetales verde oscuro, cereales integrales y legumbres.

El zinc: Intensifica la respuesta inmunológica del organismo y es un potente antioxidante, entre otras cosas. Se encuentra en pescados, huevos, legumbres y cereales integrales, nueces, castañas, pastas y arroz integral o yamaní y avena.

En síntesis:

1. Consumí frutas y verduras TODOS LOS DIAS.
2. Consumí legumbres, granos enteros y cereales integrales, semillas y frutas secas.
3. Acordate de estar hidratado. El agua y las infusiones sin azúcar ayudan a la hidratación y mejoran la piel y mucosas que se resecan con la exposición a calefacciones y aires acondicionados

… Este año al frío le ganamos con alimentación balanceada y algunos cuidados!